
Aún no ha muerto la gloria ni la libertad de Ucrania,
Aún a nosotros, hermanos compatriotas, nos sonreirá la fortuna.
Se desvanecerán nuestros enemigos, como el rocío bajo el sol.
Gobernaremos nosotros, hermanos, en nuestra propia tierra.
Coro:
El alma y el cuerpo sacrificaremos por nuestra libertad,
Y mostraremos que nosotros, hermanos, somos de la nación cosaca.
Desde aquí toda mi solidaridad con un pueblo vejado e invadido. Desde aquí mi defensa de la democracia frente a la dictadura. Desde aquí mi deseo de poner punto final a un individuo que parece seguir al pie de la letra un libro de instrucciones escrito por el mismísimo Hitler. Desde aquí una voz a la clase política europea que parece no darse cuenta de que sigue el camino de Chamberlain. Desde aquí una petición de firmeza y paz. Sé que es fácil decirlo y no sé como se hace eso pero yo no soy político, quien dice serlo debe saber marcar el camino.
Quizás te guste ver otras entradas: